9 de octubre de 2006


Está ahí. No puede ocultarse de mis ojos.
Preso por las cuatro paredes de la obra.
Fumando un cigarrillo en la oscuridad de su nido.
Privacidad cero.
Fea situación para un reservado.
Conviviendo con los dolores del baño químico.
Me pregunto que siente cuando lo observo y lo saludo desde la lejanía.
Pánico a las miradas.
La relación avanza, junto a la construcción.
Una intriga me mantiene a la espera por conocernos.

No hay comentarios.: